Desde el principio de la pandemia empezamos a desarrollar nuevas ideas y propuestas para poder mantener el contacto con las escuelas a distancia, en un año en el que no era posible hacer viajes o visitas presenciales.
Por eso, parte de nuestro equipo se encargó de realizar el seguimiento y acompañamiento a distancia de los equipos docentes y familias. Esto se convirtió en una parte fundamental de nuestro trabajo este año, que hizo posible seguir en contacto a pesar de las dificultades.
Como parte de las estrategias, diseñamos un diagnóstico de relevamiento, que nos permitió conocer el porcentaje de las familias que producen sus propios alimentos en casa, en este momento en el que muchas escuelas del país todavía están cerradas.
Como uno de los resultados del diagnóstico, se incrementaron los pedidos de las familias para poder tener acceso a semillas, plantines y capacitaciones de huerta.
Ante estas nuevas necesidades, empezamos a reformular el tipo de acompañamiento, para adaptarnos al crecimiento que tuvieron las huertas en casa y su importancia para las familias.
Un ejemplo del acompañamiento que empezamos a brindar a las familias, respaldados y trabajando en conjunto con los equipos docentes de cada escuela, es el Jardín N°911 de San Vicente, en Provincia de Buenos Aires.
En este contexto se organizó, junto a la comunidad del Jardín N°911 de San Vicente, la entrega de Kits de semillas, plantines y bolsas de compost para sus huertas en casa.
Este nuevo acompañamiento fue producto de mucho trabajo y compromiso por parte de las familias, las docentes y los miembros de nuestro equipo.
La comunidad de la escuela destinó mucho trabajo y esfuerzo para que los niños y niñas pudieran seguir teniendo sus cosechas en casa, durante el cierre de la escuela por la pandemia.
De esa manera, el 25 de septiembre una parte de nuestro equipo, formado por Bárbara Kuss (Directora Ejecutiva de Huerta Niño), Fiorella Costantino (Directora de Programas) y Pablo Rouaux (Gestión de Proyectos) visitó el Jardín y junto a las docentes hicieron la entrega de los materiales para las huertas.
Fue una gran jornada en la que se pudo charlar directamente con las familias y conocer cómo estaban avanzando con sus huertas.
Posteriormente, para continuar con el proceso del Programa se realizó el Taller de Huerta virtual junto a las familias para capacitarlos en todo lo necesario para cuidar una huerta y despejar dudas.
De esa manera, pudimos empezar a proponer nuevas maneras de seguir impulsando proyectos de huerta, aún a la distancia.
Y de la misma manera que los proyectos de huerta en la escuela crecían y se desarrollaban, nuestro objetivo es acompañar a las huertas familiares fortaleciendo cada etapa con nuevas capacitaciones.
La entrega de recursos en el Jardín de Infantes N°911 es la primera de muchas otras actividades que tenemos planificadas con otras escuelas, para sus huertas en casa.
A la comunidad del Jardín N°911: ¡muchas gracias por recibirnos y felicitaciones por todos sus avances!
vivo en Rosario y soy donante y dseo saber si aqui se puede desarrollar esa actividad en barrios humildes ya que se habla tanto del hambre y falta de comida c mo se haria una huerta familiar en estas zonas con gente carenciada. SALUDOS
¡Hola Anita!
¡Muchas gracias por acompañarnos con tu donación! Por el momento, nuestro primer punto de contacto con la comunidad siguen siendo las escuelas, a partir de las cuales acompañamos a las familias de los alumnos en el desarrollo de sus proyectos de huerta. Si conocés escuelas que estuvieran interesadas en postularse a tener su proyecto, podés brindarles este mail para que nos escriban: a: info@mihuerta.org.ar. Quedamos pendiente de cualquier otra consulta.
¡Muchas gracias y saludos!