El pasado mes de octubre, se realizó el último viaje de relevamiento del año en el interior del país. En este recorrido participaron Fiorella Costantino, Julia Pérez Bustillo, Juan Lapetini del equipo de Huerta Niño y Gabriel Garigali, voluntario de la Fundación desde 2014 y quien por primera vez nos acompaña en la ruta para conocer en primera persona a los participantes del programa.

Compartimos su testimonio, luego de una semana conociendo 35 proyectos en las provincias de Chaco y Formosa.

Si participar como voluntario en las cenas anuales siempre fue una experiencia gratificante, imaginé que mucho más lo sería viajar y conocer personalmente las huertas, las escuelas, y principalmente los niños. Aunque sentía incertidumbre sobre mi rol, acepté la invitación sin dudar.

Nuestro objetivo era el relevamiento de las escuelas posibles receptoras del apoyo de la fundación. Para ello, nos encontramos con los técnicos del INTA de cada zona, visitamos las escuelas, escuchamos a los directivos y visualizamos las necesidades de la huerta (alambrados, media sombras, sistemas de riego, etc.) para que una vez analizados estos datos, evaluar qué proyectos se pueden acompañar.

Desde Buenos Aires, una parte del equipo de la fundación coordinaba con los docentes el horario de nuestras visitas, por lo que generalmente nos estaban esperando y nos recibían con mucho entusiasmo. Fue muy emocionante encontrarnos con carteles o canciones de bienvenida, cartas escritas por los alumnos y también unos ricos guisos si era la hora del almuerzo.

Una de las cosas que primero me llamó la atención fue que las escuelas estaban bastante lindas en su mayoría, pintadas, prolijas.

Otra, fue la problemática de la falta de agua corriente. En ciertas zonas la sacaban de pozos (algunas napas son de agua salada, a veces es agua contaminada con arsénico o glifosato), otros dependían de un camión cisterna que la repartía y algunos la acumulaban de las lluvias que caen sobre los techados y con unas canaletas la dirigían a unos tanques. Imposible volver a la rutina diaria sin valorar el agua que sale de la canilla de tu casa.

Fueron días intensos, de levantarnos temprano y volver tarde, pero satisfechos. Los números dicen que en 7 días visitamos 35 escuelas de 2 provincias y que recorrimos más de 4200 kms. Estos datos tal vez los retenga con el paso del tiempo.Lo que nunca voy a olvidar, entre muchas otras cosas, es la alegría de los chicos de la comunidad originaria Pilagas, mientras ayudaban a entrar un tanque de agua que llevamos a Pozo Molina, o el partido de fútbol que jugamos en Campo Alegre, con esos alumnos tan respetuosos como conocedores de la huerta y que mucho me enseñaron de plantas. O el ejemplo de Mirta, esa maestra que nos acompañó hasta su escuela en Pampa el Gallo, un paraje con unas pocas casitas desparramadas en el campo. Ella, a diario, recorre más de 20 kms de camino de tierra en su moto, se detiene a mitad de camino a recoger tres hermanitos que son parte de sus ocho alumnos y los lleva hasta la escuela donde los educa, los contiene y los alimenta con el magro presupuesto que maneja y lo que recogen de la huerta que también enseña a cultivar y valorar. Una de las tantas heroínas anónimas que a veces uno tiene la suerte de conocer.

Porque me hicieron sentir muy a gusto y parte del equipo desde el kilómetro cero, muchas gracias Juli, Fio, Juan. Por lo enriquecedor del viaje, por lo noble del proyecto, muchas gracias “Fundación Huerta Niño”. Cuenten conmigo siempre”

Gabriel Garigali

Voluntario

Así como para Gabriel era el primer viaje de relevamiento, conociendo por primera vez los proyectos desde su inicio; para Juan son incontables la cantidad de kilómetros que ha recorrido en su experiencia como miembro en diferentes roles dentro de la fundación. Sin embargo, la esencia del viaje y la carga emocional que conlleva esta igual y no las comparte:

“Viajo desde hace 10 años y aunque he cambiado de rol, cada viaje es muy especial. Hemos visitado varias comunidades, hemos hablado con Directores, niños y niñas, maestros, técnicos, presidentes de EFA y Caciques de pueblos originarios.

En todos hemos podido percibir la sensibilidad, el compromiso con sus comunidades, con la humanidad misma y es allí donde está la fuerza que le da sustento al proyecto!

Desde el equipo que diseño el viaje, los viajeros y el equipo que nos dio sustento desde la oficina, siento que desde ese primer viaje hace más de 10 años, hemos evolucionado muchísimo. Sobre todo porque esa evolución técnica, jamás dejó de impregnarse de las sensaciones emotivas de los viajeros, del partido de fútbol, de las caminatas, de las miradas tristes, de las risas y sobre todo de haber elegido este camino, que es el que propone Huerta Niño desde su misión!”

Juan Lapetini

Secretario del Consejo de Administración, Fundación Huerta Niño

Estos recorridos nos permiten conocer las escuelas que quieren su propio proyecto de huerta, sus metas, problemáticas y sueños. También nos permite apoyar a proyectos en construcción a continuar y lograr la sustentabilidad del mismo y por ultimo nos permite hacer seguimiento a aquellos proyectos que ya tienen cosechas y continúan produciendo y creciendo a lo largo del tiempo.

En esta oportunidad fueron 35 las escuelas relavadas, comenzando el primer día en la provincia de Chaco con 9 escuelas visitadas:

  • Escuela “Prof.Edith E. Guezzi”- Corzuela, Chaco.
  • Escuela Nro. 658 – Corzuela, Chaco
  • Escuela Nro. 307 “Fortín Las Chuñas” – Campo Largo, Chaco
  • Comedor Asoc. Civil Niños Caritas Felices – Concepción del Bermejo, Chaco.
  • Escuela Nro. 657 – Pampa del Infierno, Chaco.
  • Escuela Nro. 246 “Juan Martin de Pueyrredón Pilagas”, El Espinillo, Formosa.
  • Escuela Nro. 118 “Roque Lucero” – Laguna Blanca, Formosa.
  • Hogar “Provincia de Jujuy” –  Colonia San José, Formosa.
  • Escuela “Maestro Eusebio Santillán” – Colonia san Isidro, Formosa.

El segundo día también se visitaron un total de 9 proyectos, entre estas dos provincias:

  • Escuela Nro. 367 “Juan Amos Comenio” – R. Saenz Peña, Chaco.
  • Escuela Nro. 133 – Quitilipi, Chaco.
  • Escuela Nro. 502 – Napenai, Chaco.
  • Escuela Nro. 233 “Prof. Adán Barrios – R. Sáenz Peña, Chaco.
  • Escuela «Nuestra Señora de la Guardia» – R. Sáenz Peña, Chaco.
  • Escuela Nro. 375 – Quitilipi, Chaco.
  • Escuela Nro. 449 “Bermejo Pozo Molina” – Pozo Molina, Formosa.
  • Escuela Nro. 79 – Juan Gregorio Bazan, Formosa.
  • Esucela Nro. 161 – Paraje Campo alegre, Formosa

Luego de dos días de recorrido, se continuó el viaje para visitar 8 proyectos más de la provincia de Chaco.

  • Escuela Nro. 328 “Virgen Grala. Ntra. Sra. del Carmén” – Tres Isletas, Chaco.
  • Escuela Nro. 624 – Paraje El Boqueron, Chaco.
  • Escuela Nro. 781 – El Quemadito, Chaco.
  • Anexo a Escuela Nro. 781 – El Quemadito, Chaco.
  • Escuela Nro. 870 “Fransisco Bosch” – Tres Isletas, Chaco.
  • Escuela Nro. 134 – Paraje Zaparinqui, Juan José Castelli. Chaco.
  • Escuela Nro. 358 – Juan José Castelli, Chaco
  • Escuela Nro. 94 “E.E.P. Nº 94-Carlos Pelegrini” – Pampa del Indio, Chaco.

En el Cuarto día se realizó la visita de 4 instituciones:

  • Escuela Nº 66 EFA «Santa Elena», Colonia Santa Elena, Chaco.
  • Escuela EFA Nro. 148, Colonias Unidas, Chaco.
  • Escuela Nro. 100 “Capitán Oreste Arbo y Blanco” – General José de San Martin, Chaco.
  • Escuela Nro. 52 “E.P.E.P. “Ing. Julio Henri” – Villa Escolar, Formosa.

Por último, para cerrar la semana de recorrido, se visitaron los últimos 5 proyectos de la provincia de Chaco.

  • Escuela Nro. 151 Escuela de la Familia Agrícola Loma Alta – Basail, Chaco.
  • Escuela Nro. 659 Paraje El Saladiillo – Basail, Chaco.
  • Escuela “René Favaloro” – Basail, Chaco.
  • Escuela Nro. 224 – Basail, Chaco.
  • Anexo Escuela Nro. 224 – Basail, Chaco.