El mes pasado tuvimos la gran oportunidad de volver a tener actividades presenciales en un proyecto.
Después de más de un año de trabajo a distancia, acompañando de esa manera a las comunidades y realizando algunas jornadas puntuales de entrega de materiales para las huertas familiares, nuestro equipo tuvo la posibilidad de visitar al Jardín N°911 de San Vicente.
Su proyecto de huerta, que ya lleva muchos años, es un gran ejemplo del compromiso de la comunidad, que siempre lo mantiene activo. Las docentes, además, fueron las que empezaron a acompañar a las familias, para dar un mayor impulso a sus propias huertas, desde el inicio de la pandemia.
Durante el año pasado tuvimos la posibilidad de acompañar estos proyectos, realizando varias jornadas de entrega de materiales para las huertas familiares, lo que incluyó la entrega de semillas y plantines, además de bolsas de compost.
Pero este año, con el regreso de las clases presenciales, era importante que su proyecto escolar también estuviera listo para reactivarse completamente. Por eso, nuestro equipo planificó una jornada para renovar su proyecto.
Para nuestro equipo, representó una gran oportunidad para volver a ser parte de un proyecto presencialmente, algo que por la pandemia había quedado muy restringido.
Por eso, durante todo el día y cuidando los protocolos, se llevó adelante la construcción de nuevos canteros de altura y la mejora de los postes de la huerta, a los que se protegió con una nueva capa de aceite de lino. Además, una vez listos los canteros, se dejaron ya preparados con tierra y nuevos plantines, que en un tiempo van a ser una nueva cosecha para la escuela.
Queremos agradecer especialmente a toda la comunidad y a las docentes que nos recibieron para esta actividad tan especial. Para nosotros, es un gusto ver cómo su huerta sigue avanzando y su compromiso con el proyecto.
¡Juntos seguimos sembrando futuro!